sábado, 23 de abril de 2016

El Caballero de la Triste Figura.

Cómo no va a estar triste mi alma poeta si mi musa ha huido por verme demasiado alegre. Me acompaña Soledad, pero hoy es más que suficiente. Estoy yo, yo mismo, encerrado en mi atalaya desde donde observo cada movimiento ajeno y disfruto de mi privilegiada posición. No sé si estoy loco o he escapado de las cuerdas de la cordura, pero hoy cabalgo a Rocinante y no hay molinos que me venzan.

Cómo no va a estar triste mi alma poeta si mi musa ha huido por verme demasiado alegre. Ya no lloro versos a la luna llena, ya no apuro el vaso para escribir el último párrafo.